sábado, 25 de julio de 2015

Punto.

No se puede forzar a querer y por eso después de haberlo intentado tantas veces es mejor dejarlo ir, aunque no queramos entenderlo en el momento. Con el tiempo vemos que eso fue lo mejor que nos paso.
Aunque sigo sosteniendo que va ser insuperable, solo espero que llegue el momento en que de verdad no me importe saber de él, que no me interese su existencia pero no puedo, en el fondo es lo único que me importa y todo lo que quiero saber es sobre él. Pero él solo quiere saber de otra persona, que no soy yo, porque no me eligió, y por que insisto entonces? Por que lamentablemente me enamoré, caí en el juego y me toco perder. Por que fui ciega, por que no la vi venir, por que no quise ver tal vez, por que algo me decía que no podía ser tan perfecto. Y ese algo termino teniendo toda la razón del mundo, y ahora yo estoy pagando las consecuencias de haberme encegado tanto sabiendo que era lo que podía pasar. Por que no quise ver, por que no quería creer que eso que me hacia tan bien y me completara se estuviera yendo, no quise dejarlo por que sentía que sin él todo se terminaba, que no iba a existir otra persona y fue el fin del mundo, entonces exploté. Todas esas cosas, dudas tal vez, sin respuestas, salieron a la luz. Era mucho el peso que tenia/sentía y tenía que contarle a alguien, necesitaba opiniones, no solo que mi cabeza respondiera, y ahí estaban ellas. Mis amigas, mi mamá. Me apoyaron, me dijeron lo que creían: Él nunca te quiso. 
Me mató y no quise aceptarlo, pero fue así, nunca me quiso. Nunca lo va hacer. El pudo seguir con su vida porque nunca le afecto nada mío, no le importo. Sin embargo quise hacer como él y tarde toda la vida. Y no puedo, no tengo fuerzas. Estuve en una pelea en la cual me bombardearon de todos lados y no pedí refuerzos por que no los quería, sabía que me iban a juzgar, a mirar con pena. Y así fue, la mayoría. Por eso nunca expongo lo que siento o me parece, prefiero pasar como una chica "fuerte" y "desinteresada" a que contar toda la historia. Pero dolió y sigue doliendo. 
Pero tuve que seguir, por que así es la vida, no frena por que vos estas mal, aunque tengas mala cara o ganas de nada, todo sigue. Avanza.
Y en ese avance que tenemos, pasan cosas. Lindas, feas, pero pasan. Para bien o para mal. Todo pasa por algo. Sin sufrimiento, dolor, llanto, no se avanza. De los errores se aprende, para no volver, para que no pase igual. Y si, nos podemos equivocar dos veces, o tres, en un mismo tema, y tal vez duela, pero es nuestra vida. La manejamos. Nadie va a decirnos que hacer ni cuando. Pero si duele, hay que dejar. Aunque no queramos saber nada con dejar, ni soltar, ni reemplazar, ni olvidar.
Primero nosotros, aunque suene egoísta. Esas personas que nos hicieron mal, también lo son. Y parece ser que les va mejor siendo garcas. Tal vez hay que serlo. O tal vez no.
Pagar con la misma moneda no nos va a devolver o a volver el tiempo atrás. Es más, empeora.
Querelo con todo o no lo quieras, no ilusiones. 
Soltar, tiempo, distancia. Es lo único que parece ser la solución.